miércoles, 12 de noviembre de 2008

Y un día pensé en mí.

No sueño tu belleza.
No percibo tu color.
Ya no creo en la oscuridad que me espera tras de vos.
Aunque alborotes mis deseos, me completas de soledades.
Poco queda ya de tu perfume.
Lo artificial va copando tu voz.
Y ya no estoy dispuesto a escuchar las risas desde afuera.
Mi victoria no esta consumada, pero esta predestinada.
Te saludo!
Que nos vaya mejor a los dos.